26 Sep

El pan

por Jean Murdock  @CgAjeanmurdock

carson-mccullers-3Carson McCullers y Lorrie Moore dirían que viene del sobaco de un francés.

[La profesora de español viajó a Europa en una ocasión. Decía que en Francia la gente se llevaba el pan a casa sin envolver, que cuando se paraban a charlar en la calle golpeaban las farolas con el pan. Y que en Francia no había agua, solo vino, dice Mick Kelly en El corazón es un cazador solitario, de McCullers.

«Y además, ¿por qué todo el mundo en toda la ciudad tiene que tocar el pan? Sales a por pan y el panadero lo toca, el cajero lo toca, el dependiente te lo da con la mano y finalmente hasta tú mismo te lo encajas en la axila y sales y chocas con él con otra gente en la calle. ¿Cómo podemos celebrar un congreso médico en una ciudad con un pan tan insalubre? (Lorrie Moore, ¿Quién llevará el hospital de ranas?[1])]

Pero pan significa todo y viene del griego y de un dios con forma de cabra por abajo y de hombre por arriba, cosa muy inquietante, sobre todo teniendo en cuenta que suele ser al revés. Como Pan tocaba la flauta, el pan tiene forma de barra, aunque luego unos parisinos que eran vaguetes pero creativos le dieron forma de todo para hacer gala –como corresponde a un francés– de su significado, y eso porque pan significa todo, como hemos visto.

Para algunos, el pan es algo que viene de la otra punta de la mesa gracias a un característico gesto del mentón que se efectúa sin mediar palabra. Para otros, es un cráter en una luna de Júpiter, el cuerpo de Cristo o el apellido de Peter, un niño lamentable que tenía molta barra[2]. Claro que la mentecata de Wendy no ayudaba. Porque, hablando de pan, la muy panoli se ofrece a limpiarle la casa cada primavera. ¿¿¿Pero qué rayos de libro es ese, Barrie??? La maravillosa historia de una atontada que solo quiere ser madre de todos, en especial de un cretino que no quiere dejar de serlo. Para rebanarlos. Mi pan, sin Peter, gracias, y con mucha mantequilla de Alicia. Hablando de maravillas, el árbol del pan es como el del dinero: no funciona. El pan se hace con sal, agua y levadura, y ha pasado de ser básico y barato a ser tóxico y nocivo pero –¡sorpresa!– un producto de lujo, lo cual solo puede describirse como una panadoja. Al parecer es todo culpa del trigo, que nunca es limpio. La cosa tiene miga pero es harina de otro costal y no hay pan para tanto panegírico.

 

[1] El libro se editó en España como El hospital de ranas, pero en mi panorámica opinión debería respetarse el original y traducirse por ¿Quién llevará el hospital de ranas? La desazón que refleja esa pregunta es necesaria y el pan mismo del libro.

[2] Llegados a este punto, es de agradecer que me calle el pun con Barrie.

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *